martes, 21 de febrero de 2017

Entrevista a Silvia Marsó

¡Hola a todos! Hoy tenemos con nosotros a una gran actriz. Es todo un honor que haya aceptado inaugurar el apartado de Espectáculo… ¡Vamos a ello!


Por todos es conocida Silvia Marsó, que a pesar de comenzar su trayectoria en el Un, dos, tres es una gran dama del teatro, con incursiones conocidas en televisión como en Ana y los siete o más recientemente Gran Reserva – El Origen. En teatro, estos últimos tiempos, ha pasado por Yerma, El zoo de cristal y actualmente La puerta de al lado, antes de embarcarse en su próximo proyecto 24 horas en la vida de una mujer.

A Silvia Marsó le han hecho muchas entrevistas, por eso no pretendo entretenerme en preguntar cosas sobre las últimas obras o facetas ya conocidas. Ahondemos en la persona que hay detrás de la actriz que todos conocemos.



Bienvenida seas, Silvia Marsó, a mi blog. Es todo un honor que inaugures una sección hermosa donde tienen cabida todas las personas que trabajan en el sector del espectáculo. En primer lugar, me gustaría que nos hicieses participes de dónde proviene el impulso que cada mañana te permite enfrentarte a esta profesión tan dura, arriesgada y maravillosa. Amor, sacrificio, público, familia, arte.

¿Qué ha permitido que sigas durante tantos años en ella?

Supongo que tendrá que ver la ilusión o la vocación, que me acompañan desde que era una niña. Lo importante es no perder la ilusión y las ganas de trabajar porque esta profesión tiene muchos altibajos y mucha incertidumbre.


¿Cómo has sido capaz de moverte entre tantos proyectos y conseguir vivir de ello? Bien sé lo duro que es ser actor y los altibajos que ello supone.

Es cuestión de tener paciencia, de prepararse constantemente y de no tener prisa. De disfrutar de cada momento que la profesión te ofrece. Y, sobre todo, aprender mucho de nuestros mayores: los actores consagrados. Ver mucho cine, mucho teatro y muchos vídeos de otras obras.


¿Qué quería ser la Silvia pre-actriz? Es decir, ¿siempre pensaste en serlo –teniendo en cuenta lo joven que empezaste a hacer de mimo por las calles de Barcelona adoptando el apellido de Marcel Marceau- o soñabas con ser otras cosas antes que ello?

No. Siempre soñé con ser actriz. Lo tuve muy claro desde los 10 años y nunca he dejado de sentir que era el trabajo que quería hacer el resto de mi vida.


Cuéntanos un poco sobre tus luchas: tu amor por los animales, tu vinculación a Greenpeace; tu fe y tu apoyo por los nuevos actores.

Me puse muy contenta cuando Greenpeace abrió su delegación en España, hace más de 25 años. Enseguida me hice socia porque desde la tierna infancia he sentido un amor infinito por la naturaleza. Creo que el hombre no es justo con ella y que no sólo perjudicamos al planeta, sino que también nos perjudicamos a nosotros mismos.


¿Cuáles son las características imprescindibles para ser un buen actor?

No lo sé. Creo que hay algo innato, que no se puede aprender en las escuelas, no es tangible. Creo que quien lo tiene es porque el destino ha querido que así fuera. Lo importante es respetar ese don que te ha dado la naturaleza y prepararte a fondo, para poder desarrollarlo.


¿Crees que pese a que el estudio es necesario, muchos actores sin él brillan por su talento antes de llevarlo a cabo, y, sobre todo, crees que pese al estudio, algún actor puede llegar a carecer de lo necesario para dedicarse a la profesión?

Creo que lo importante es intentarlo y que no sabemos quién puede llegar o quién no. Lo más importante, repito, es no tirar la toalla y procurar siempre avanzar poco a poco, con tesón y con muchas ganas de aprender. Me consta que, por ejemplo, Paco Rabal nunca estudió para hacer de actor. Era técnico de luces en los rodajes en los años 60 en España. Un día tuvo que hacer una sustitución de un actor que se había puesto enfermo. Tenía tanta verdad y tanta vida interior, tanto poder de comunicación, que aprendió el oficio enseguida y se convirtió en uno de los actores más importantes que hemos tenido. Y este es un ejemplo de lo aleatorio, imprevisible y mágico de nuestro oficio.


En relación con ello, coincides con Ana Belén en el discurso que dio por su Goya de Honor cuando manifestó las dificultades de la mujer en una profesión como la actuación. ¿Cuál es tu posición en este tema?

Creo que en España estamos muy por debajo del nivel de paridad que hay en otros países europeos. Estoy absolutamente de acuerdo con las palabras de Ana Belén y no sólo eso, sino que pertenezco a la junta directiva de la asociación CIMA, que es la encargada de hacer estudios y luchar por la igualdad de la mujer en los medios audiovisuales, cine y televisión.

Afortunadamente, ya somos muchas socias. En uno de los estudios más recientes, se comprobó que siempre hay más directores nominados a premios que directoras; siempre hay más personajes masculinos que femeninos en las películas. Eso también ocurre con los departamentos técnicos de sonido, luces y cámaras, así como con las guionistas y productoras. Poco a poco, iremos logrando la igualdad que existe en Francia, en Inglaterra y en otros países europeos.

[Nota agregada a lo que dice Silvia Marsó: Si deseáis saber más sobre CIMA, sólo tenéis que dar click en el siguiente enlace: http://cimamujerescineastas.es/que-es-cima/].

Hay muchos actores que se consideran personas tímidas pero que son capaces de enfrentarse con mucha fuerza al público. ¿Cómo te consideras tú?

No tiene nada que ver una cosa con la otra, no importa si eres una persona extrovertida o introvertida. Pues, cuando aprendes a trabajar tus propios sentimientos y tus resortes internos para interpretar, aunque seas una persona introvertida lo logras. Incluso creo que para las personas más tímidas puede ser mejor porque es una forma de convertirse en otro personaje que no eres tú. Y precisamente eso te abre muchas vías de comunicación.


Por último, ¿qué sueñas con aportar y qué aportas al mundo a través de tu trayectoria y tu persona?

Desde mi granito de arena, creo que lo que aporto es el hecho de poder llevar textos de autores muy importantes a las tablas para que el público escuche lo que nos dicen esas obras maravillosas.

Para mí es un honor ser el vehículo para que esas obras de la dramaturgia de todos los tiempos lleguen al público de hoy. ¡Ver a gente joven en el patio de butacas me llena de alegría!

[Nota agregada: Yo misma estuve viendo a Silvia en Yerma cuando estuvo en Barcelona en el año 2014 y debo decir lo maravillosa que me pareció su actuación, lo genial me pareció la escenografía, los actores y la obra en general del gran Federico García Lorca. Su obra me llevó a conocer a una actriz como ella.
En un contrapunto totalmente subjetivo, estuve en la Comédie française en París, donde los actores siempre actúan en el mismo lugar y tienen un sueldo fijo, viendo La casa de Bernarda Alba del mismo autor.
Argumento lo siguiente: la escenografía era una belleza y eran buenos actores, sin embargo, la protagonista principal para su gran trayectoria no me pareció la mitad de trabajada y ceñida a la obra de Lorca como me lo pareció Silvia.
Comparen lo siguiente: en la obra de Yerma que protagonizaba Silvia había bastante público, pero no rebosante, por lo menos ese día -3 días después del estreno-. Aplaudieron bastante. En París, el público, dos semanas después o más del estreno, era rebosante. Los aplausos fueron incesantes durante casi diez minutos. Me sentí desolada al vivir aquello y pensé, como dice Silvia, que ojalá España llegué a eso algún día, lo más pronto posible (por ello hay que llevar a cabo una tarea de concienciación).
En Francia es raro ir por la calle con gente joven y que no te hablen de las obras de teatro que se están estrenando. Por cosas así hay que apoyar a los actores de este país, que derrochan calidad y pasan precariedades. Silvia es una valiente y lucha mucho más de lo que puede apreciarse. Soy consciente incluso de que es su propia productora.
Por ello, viva la cultura y no ceséis de dar amor y espacio en vuestras vidas a la cultura. Recordad que un país sin una buena cultura pierde mucho como país.
Después de mi parrafada, seguimos…]


¿Cuáles son esas cosas maravillosas qué legas a tu hijo y qué crees que la gente tendría que comprender y valorar más?

Creo que lo que más me he preocupado de darle ha sido siempre mucho amor. Enseñarle valores como la solidaridad, el respeto por la naturaleza y por el prójimo. Y, sobre todo, la sinceridad y la honestidad, que para mí son los valores más importantes. Pero, como hemos hecho todos, tiene que aprender equivocándose. 


Hasta aquí. Soy consciente de tu nivel de trabajo y te agradezco tus respuestas y tu presencia e inauguración de esta sección. Te deseo lo mejor. Siempre al otro lado, Silvia. Hasta siempre.

Espero que os haya gustado. Me gustaría conocer vuestras opiniones.

Hasta pronto y feliz día, amigos.

Un abrazo,

Adriana

3 comentarios:

  1. Hola he de decir que me a impresionado tanto en las preguntas como en las respuestas pero discrepo en que en este sector (por lo menos en los años 78 80)la situación era otra hablo en primera persona como yo lo vivi.Yo como a muchas chicas de mi edad por aquella época,bueno antes de nada debo añadir que a mi también desde muy pequeña me hubiera gustado ser actriz de cine de echo soñaba con ello, dicho esto continuo las cosas no me salieron como yo pensé yo me fui a Madrid muy joven a la aventura conocí mucha gente del mundo del cine directores actores ectect pero no obtuve nada de nada ni siquiera suerte por lo contrario cada vez que me daban un guión o no me gustaba (no me gustaba porque lo veia muy pornografico)o primero tenía que acostarme con el director es penoso decir esto pero es lo que había y es así porque lo he vivido a si por lo contrario hoy en día es diferente y me alegra saber que es diferente con lo cual me satisface saber que las cosas en este sentido hayan cambiado ufffff me parece que me es desviado mucho sobre lo que se tenía que comentar pero creo que es una manera de desahogarme por no conseguir mis sueños.
    Bueno Ada a estado muy bien tu primera entrevista y a Silvia Marso le digo que siga adelante al menos ella consiguió su propósito y sus sueños de ser atriz así que adelante sigue así te admiró un saludo para ti y otro para Ada O Adriana.

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  2. Ada, preciosa entrevista. Cada día me gusta más leerte.Me gustaría saber si eres periodista o estudias periodismo, porque de lo contrario diría que tienes un Don para hacer estas entrevistas tan maravillosas... Un saludo enorme hasta la próxima espero sea muy pronto

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  3. Me ha encantado la entrevista. Le deseo todo lo mejor a Silvia. Solo un apunte para la entrevistadora: te sobran dos tildes en una frase. En el resto del texto no me he fijado, simplemente he visto esto de pasada. No es que vaya corrigiendo a la gente todo el tiempo... Supongo que para muchos poner o no poner dos tildes no tiene importancia, pero igual que admiro la profesionalidad en un actor, no puedo evitar tratar de ayudar a que los demás escriban cada vez mejor. Espero que no te ofendas. Lo hago con la mejor intención. Simplemente al leer en voz alta la frase se nota que sobran las tildes. Yo he escrito ya la frase sin las dos tildes que sobran. Un saludo. «¿Cuáles son esas cosas maravillosas que legas a tu hijo y que crees que la gente tendría que comprender y valorar más?»

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